De acuerdo, ¡de acuerdo! Reconozco que no son formas de hacer las cosas… Escribir un post desencantado y cabreado con el mundo del blogging y después desaparecer durante seis meses. ¡Me avergüenzo de mí misma! Quizá hayáis pensado que me quemé con este mundo: abandoné mi blog, dejé sin responder vuestros comentarios, también vuestros correos… ¿Qué me pasó, con lo que yo prometía? Publicaba todos los miércoles, era fiel a mi estilo, me dabais un feedback que ya quisieran muchos…
Hoy vengo a confesar. Y no, no es porque sea principio de año y me haya hecho una lista de propósitos. Nunca me funcionan porque siempre las pierdo. Es porque estoy escribiendo un libro.
Pero antes del libro, ¿por qué abandoné mi blog?
La última vez que nos vimos por aquí, yo estaba en la República Checa. Viajaba en bicicleta hacia Cabo Norte y aún me quedaban tres meses de viaje por delante. Me había propuesto escribir unos postazos de escándalo gracias a estar viviendo por fin el modelo de vida que había perseguido y, durante ocho semanas, cumplí con la cuota. Pero, ¿por qué dejé de escribir justo cuando más inspirada debía estar?
En enero de 2015 empecé a trabajar como redactora online (¡bien!), lo cual me permitía (y me permite) obtener ingresos suficientes para una economía minimalista y trotamundos. Desde abril hasta septiembre, recorrimos nueve países europeos con un presupuesto de 15€ al día que incluían el sustento para dos humanos y un perrito adorable. Incluso en Noruega, el país más caro en el que hemos estado con gran diferencia, era posible mantener ese presupuesto límite. Hasta aquí todo estupendo.
Lo que te hace libre, ¿puede hacerte esclavo?
Pero no contaba yo con que la vida está llena de paradojas y aquello que me había hecho libre para viajar sin tener que depender de una ubicación geográfica concreta para obtener ingresos, me esclavizó en otros aspectos. No quiero exagerar; fue una esclavitud muy suave, sin latigazos ni nada. Pero estaba comprometida a escribir cuatro posts semanales para diferentes blogs, cinco si contamos el mío. Eso sumado a algún trabajillo suelto. Y os diréis, “pues vaya escritora de pacotilla, que tiene que hacer cinco publicaciones semanales y se derrumba”.
Eso es que no estáis teniendo en cuenta el factor “ahora súbete a una bici, cárgala con alforjas, y pedalea de seis a ocho horas diarias”. Me paraba a escribir a eso de las siete u ocho de la tarde, cuando terminaba el día y la verdad… A veces hubiese pagado el doble de lo que yo cobro por no tener que hacerlo.
Nooo, no me estoy quejando, de verdad que no. Tenía todo lo que quería: había conseguido mantenerme escribiendo, vivía viajando, los pajaritos cantaban y las nubes se levantaban y, una vez, hasta nos invitaron a comer tarta. Pero las piezas no encajaban como debían. La excesiva carga de esfuerzo y trabajo acabó por desbordarme.
Cuando el esfuerzo es demasiado, lo primero que abandonamos es lo nuestro
Y cuando estás en una situación así, ¿qué es lo primero que abandonas? Exacto… Lo tuyo. En el pleno sentido de la palabra. Qué ruines y villanos somos que enseguida nos traicionamos a nosotros mismos. En estos seis meses que llevo sin hablarme con vosotros, he acumulado una deuda de veinticuatro posts. Pero aquí va la buena noticia: ¡tengo algo mejor!
No pienso ser tan indecente como para disimular que esta vuelta a los escenarios es completamente interesada. Estoy escribiendo un libro y quería que lo supierais. Un libro que será como una matrioska: un viaje, dentro de otro viaje, dentro de otro viaje, y así sucesivamente. Somos una comunidad pequeñita, sólo 235 suscriptores al blog pero… Sois 235 personas que no creéis en lo convencional, que os habéis quedado aquí con todas las cosas raras que digo, que amáis leer y vivir y pensar. He creído que tenía que avisaros.
Expedición Cabo Norte: El libro
Si ya estáis hasta el gorro de verme hablar del libro como un Paco Umbral cualquiera, podéis ahorraros todo lo que viene ahora. Si no, esta es la sinopsis de ese pequeño retoño literario que pariré con dolor en este 2016:
“Pablo, Ana y Hippie forman una curiosa compañía. Subida en la bici de Pablo, en una caja sobre el portabultos, Hippie es la viva imagen de la felicidad. Su efecto sobre las personas que la ven pasar, con las orejas agitadas por el viento y la rosada lengua asomando, es casi mágico. Sonríen, se asombran, buscan frenéticamente sus teléfonos para obtener una fotografía…
Los tres comienzan su viaje el 20 de abril de 2015, arrastrados por el ansia de vivir e ilusionados con la idea de recorrer en bicicleta los miles de kilómetros que les separaban de su destino. Cabo Norte no es una meta cualquiera: es un símbolo, un reto intimidante, una declaración de intenciones. “Expedición Cabo Norte” es el libro que narra la historia real de todo lo que sucedió en aquel viaje hacia el interior del Círculo Polar Ártico.
Un viaje que discurre por distintas vertientes, como los afluentes de un río que acaban componiendo un torrente caudaloso y salvaje. Un viaje que sucede sobre la superficie de Europa, pero que expone y transforma la geografía interna de sus personajes. Una experiencia llena de significados, de pequeños matices y grandes acontecimientos, que alcanza a enfocar una perspectiva diferente de la vida, antes borrosa.
Los diferentes puntos de vista de los protagonistas se entremezclan, definiendo tres formas diferentes de vivir, sentir y asimilar una aventura de tal magnitud. Un libro lleno de aventura, emoción y lucha, que despertará en ti un intenso deseo de libertad“.
¿Suena bien o no suena bien?
¿Y cómo se consigue el libro?
Pues aunque las más reconocidas editoriales se nos disputaban como a la de Harry Potter, decidimos que no, que íbamos a editarlo nosotros mismos. Así que lanzamos una campaña con la cual el libro sale a preventa y nosotros podemos publicarlo con el mecenazgo de los futuros lectores y lectoras. Pretendíamos conseguir 2.000 € y ya hemos sobrepasado la barrera de los 5.000 €, lo cual últimamente me quita el sueño. ¡Este tiene que ser un libro épico, digno de tanta confianza!
El caso es que el libro sólo estará en preventa durante cinco días más (hasta el 10 de enero). Sabéis lo que pienso y cómo lo pienso, y que siempre intento expresarlo de forma que pueda ser útil a esa persona que está leyendo al otro lado. Y eso seguirá siendo así, aunque por una vez me leáis a través de páginas, tinta y papel.
*Actualización 2022: Luego resultó que una de las editoriales más importantes de montaña, deporte y viajes “extraños” nos compró los derechos y apostó por el libro. Ahora está aquí (y lo puedes pedir en cualquier librería).
Tú tiempo es tuyo, solo agradecerte que lo compartas de una forma tan fantástica, me refiero a tu esfuerzo y sacrificio entre otras.
Existe gente con super poderes, pero no los comparten … y otra gente como tú que nos ayudan para crecer.
Un solo post me ha servido para engancharme a tu contenido 🙂
Tómate tu tiempo, Tómate tiempo para trabajar, Tomate tu tiempo para descansar, tómate tu tiempo para reír para descubrir y aprender. Toma tu tiempo y disfruta como quieras o ¿acaso los arboles pierden las hojas que los envuelven a decisión nuestra?, ellos siguen su ciclo al igual que las personas, la naturaleza se encuentra en comunión consigo misma y es por eso que cada primavera nacen bellos e intensos brotes. Es por eso que seguro el nuevo año nos traerá (a nosotros tus lectores) una aninaanyway con mas fuerza. Porque un alto en el camino no significa el fin del mismo, porque quien aprecia el valor de tus palabras seguro que cualquier espera estará justificada.
Hola Anina,
Me considero peregrina 😉 . Esta claro que tienes el don de la palabra. Gracias por compartirlo. Me he emocionado imaginándome a Hippie con las orejas volando al viento y esa sonrisa perruna que deja ver esa rosada lengua.
Que tengas un gran, gran día, todos los días!
¡Hola, Ruth!
Muchas gracias a ti por este comentario tan positivo, de esos que animan a seguir escribiendo con sentido y con ganas.En tan pocas líneas también has hecho que yo me emocione 🙂
¡Un abrazo grande y un gran día cada día para ti también!
Anina, ya hice mi aportación en Verkami. No es el primer libro que apadrino, y es una gran satisfacción cuando recibes el fruto del esfuerzo de la persona a la que, modestamente, has podido ayudar.
Por otra parte, olvídate de la presión… relájate en lo que puedas y disfruta compartiendo tus experiencias con las personas que hemos decidido formar parte de este bonito proyecto. Nosotros creemos en ti y esperaremos, sin prisas, a que el libro aparezca en nuestra vida, y estoy seguro de que será inspirador…
Un cálido abrazo!
Hola, Antoni:
Muchísimas gracias por todo. Los mecenas sois una especie aparte: permitís que se materialicen en el mundo ideas que de otra forma se morirían en la imaginación. Ahora que lo sé y lo entiendo, yo misma trataré de empujar y dar alas a muchos más proyectos. Gracias por ser parte para siempre de este libro.
Y gracias también por tus palabras, por tu confianza y por tu empatía. La verdad es que todo esto es alimento para el espíritu. Una palabra agradable susurrada al oído siempre cambia el mundo a mejor, aunque no le demos importancia.
¡Otro abrazote para ti!
¡Preciosa! Qué alegría volver a leerte por aquí. Las circunstancias van cambiando y lo que te planteaste como factible en un momento dado, en otro puede no serlo tanto. Además, si escribes sin esa pasión y reflexión que te caracteriza, no nos hubieras dado lo que venimos buscando por aquí, así que no te preocupes que esto es la vida misma “una y sus circunstancias”.
Tómate el tiempo que necesites para volver, vuelve sin que sea una obligación e incluso escribe sólo cuando tengas algo que decir y compartir. Esa es tu elección y nosotros la aceptaremos sea cual sea.
¡Con muchas ganas de recibir ese “peazo” de libro!
P.D: Espectacular respuesta a Maria José Fumero. ¡Me encantas!
¡Hola, Bella!
No sé si es por ser una madre maravillosa, que hablas con tanta sabiduría. Tienes razón en todo, ¡en todo! Te echaba de menos.
Prometo que el libro será fiel a mí, a nosotros y, sobre todo, a vosotros. Un abrazo muy muy grande para ti y tu familia, tan bonitos 🙂
Bienvenida de nuevo, en todos los sentidos! Da gusto leerte, perderte y reencontrarte. Que ganas de leer ese libro!
¡¡Muchas gracias, David!!
A mí también me encantan todas esas cosas: perderme y reencontrarme y reencontraros y leeros. No sé qué saldrá de allí cuando por fin llegue algo a la imprenta, pero espero que sea la mitad de bueno que vosotros 😉
¡¡¡Un abrazoooooo!!!
Sere breve.
Gracias por volver a estar entre nosotros.mucho animo.
Muchísimas gracias, Jesús. Lo bueno, si breve, dos veces bueno (aunque yo nunca sido buena en eso de la brevedad).
¡Un abrazo!
Welcome back!!!!
Anitaaaa, llevar la vida que llevas no es nada fácil, y a veces cuando no hay tiempo para todo (porque intentas vivir la vida y cada minuto cuenta) te desentiendes de lo más cercano (donde hay confianza da asco), pero eso no es malo, los que te quieren te quieren, te esperan y te entienden. Y tú tienes una buena razón.
Enhorabuena por el libro!!!!
Por favor, seguir así.
Besos a Pablo y Hippie
Jajaja, ¡muchas gracias, Emilio! La verdad es que es reconfortante volver, me siento bien volviendo a regar mi pequeña florecita vivepensadora ^^
Y encontrándome de nuevo con vosotros. Con vuestro apoyo y vuestra actitud positiva ante la vida. Vosotros también me hacéis pensar y me hacéis vivir. Y eso no tiene precio.
¡¡¡Un abrazote!!!
Me encanta leerte y me da igual que sea en tú blog….en fb…o en un libro impreso.Tu aplicate el titulo del blog, y sigue dándonos buenos momentos.El que quiera seguirte te encontrara…
Muchas gracias, Tini 🙂
La verdad es que para mí recibir vuestros comentarios y saber que siempre estáis ahí para compartir conmigo un poquito del mundo, es muy alentador. En este libro también habrá un protagonista involuntario y que formó parte inseparable de mi viaje, que es Antón. Él y su lucha por vivir, que tanto nos enseñó a todos.
¡Un abrazo enoooorme!
Welcome back!!! me alegra mucho volver a leerte por aquí!
Podrías poner algún enlace o nombrar los otros blogs para los que escribías? que tienes si tu club de fans te “siguió” hasta tierras tan lejanas también lo harán a cualquier otra url 😉
¡Hola, Vero!
Muchísimas gracias por tu cálida bienvenida 🙂 Me ha llegado al corazoncito tu petición y eso del “club de fans”, jajaja. El caso es que soy lo que se llama una escritora fantasma: escribo para otros sitios, pero no firmo los textos, que van firmados por la marca que tiene el blog. Osea, que no puedo mostrarlos como míos. Es como secreto de confesión xDDD
Son negocios que tienen presencia online y necesitan actualizar un blog para que les vaya llegando clientela potencial: una academia de idiomas, una tienda de manualidades, un negocio que hace envíos de comida, un club deportivo… Nada emocionante, jajaja.
Lo emocionante lo guardo todo para vosotros 😉
¡Un abrazo!
Buenas noches, nada que decir me suscribi, desapareces, y ahora apareces, y dices que es por escribir un libro, y encima me dices como conseguirlo, no, no gracias ha sido un placer, pero mi pequeña confianza depositada en usted, se ha desvanecido, como el año 2.015.
felicitarle, por el abandono que nos ha hecho, y por su nuevo proyecto, que le dará, un reporte económico, que no será a costa mía, sin más María José Fumero.
Buenas noches, Maria José:
Verás, me apetece decirte muchas, muchísimas cosas. Pero me limitaré a las estrictamente indispensables para no hacer este comentario más largo que el propio post. Un post que no sé si has leído realmente, o has ojeado transversalmente hasta encontrarte con el libro y has hallado motivo para ofenderte. Comparto tu indignación, aunque no creo que la tuya sea tan grande como la mía.
En “Vive como Piensas” puedes encontrar un total de 30 posts. Todos ellos basados en mis experiencias y sentimientos. Ninguno de ellos fue escrito en una hora, ni en dos, ni en tres, créeme… Todos llevan dentro de sí el esfuerzo por aportar al lector un valor, una razón para pensar, algo útil. Es mi tiempo, es mi esfuerzo y es mi vida lo que lees en este blog; comprenderás que no es legítimo querer fiscalizar eso. Yo no tengo la obligación de publicar, ni tú la de leer. Ambas somos libres. A tu criterio está hacer las valoraciones. Yo tengo claras las mías.
En estos seis meses de ausencia, si has leído el post, habrás visto que he hecho un largo viaje. Un viaje monitorizado día a día a través de la página de Facebook del blog. Durante esos meses compartí reflexiones, vídeos, fotografías, momentos y hasta canciones… Un viaje durante el que, además, mi pareja y yo recaudamos 3.000€ para la investigación del cáncer de mama. Una causa para la que va destinado el 5% de lo obtenido con la venta del libro. Un libro que autoeditamos porque mucha gente lo ha pedido y porque es mi sueño.
Soy escritora, eso también deberías haberlo leído. Soy escritora y mi trabajo es escribir. Dime, Maria José… Si no puedo compartir mi primer libro con mis lectores más fieles, ¿con quién crees que debería hacerlo?
No te conozco y es obvio que tú tampoco me conoces a mí. Este comentario me ha enfadado mucho, muchísimo. Calculo que un 70% de lo obtenido en la campaña de microfinanciación será para editar el libro, imprimirlo, enviarlo, pagar impuestos, etc. Descuida, no voy a salir de pobre con él. Tampoco lo pretendo. No me voy a lucrar a tu costa, pero te aseguro que tampoco lo voy a hacer a costa de los 246 mecenas de cuya generosidad nace el proyecto más bonito que probablemente he acometido en mi vida. No vas a poder hacer que sea algo sucio, por mucho que te lo parezca.
Permite que yo también te felicite, por tu empatía y tu profunda capacidad de análisis. Y por el comentario más superficial que nadie ha dejado nunca aquí.
Muy feliz 2016.
¡Sublime respuesta!
La gente desde el anonimato y la comodidad de su pc se crece. Es el sindrome del lector-cliente. A veces exigimos como si fuesemos jefes.
Hola, Jota:
Muchas gracias por tu apoyo. Hay un dicho que aprendí en el Camino de Santiago: “El turista exige; el peregrino, agradece”. Y es una cosa más o menos así. A mí no se me ocurriría jamás reprochar a nadie que quiera ganarse la vida…
En fin. Otra de las grandes falacias de internet es que todo es gratis: el tiempo y el esfuerzo de la gente no valen nada… El dinero es un tabú, como tantas otras cosas. Habrá que seguir pensando con más ganas que nunca para que estas cosas no pasen 🙂
¡Un abrazo!
Me encanta tu forma de reflexionar sobre el mundo, tu sentido del humor y tu forma de escribir; y para que saques el lado positivo de este comentario que te han puesto y que entiendo que te haya cabreado, quiero que sepas que el hecho de que alguien se moleste en escribir un comentario tan absurdo ante un post tan sincero… me ha animado a apoyar vuestro proyecto mediante una pequeña aportación.
Te animo a seguir con tus sueños porque realmente leerte hace a la gente sentirse más fuerte, valiente y escapar de la monotonía del mundo, o al menos a mi y a los que me rodean.
Estoy deseando tener tu libro en mis manos!!! Mi tesorooooo…
Un abrazo enorme desde Murcia
Hola, Mai:
Muchísimas gracias: por el torrente de empatía, por los ánimos y por supuesto, por el apoyo con el libro 🙂
Has conseguido darle la vuelta a la tortilla en un momento y con la habilidad del mejor chef ^^ En compensación, todos los días pongo todo mi esfuerzo y mis ganas en que eso libro no os decepcione. En que encontréis en él todo lo que venías buscando en mí.
Gracias por ser apoyo de tantos sueños e ilusiones. También eso inspira y mucho, te lo aseguro.
Otro abrazo enorme para ti.
Tuve una novia que se llamaba Maria José y estaba igual de loca.. ¿Mary eres tú???? 😀
Sería un bonito reencuentro, Daniel, jajaja. Si estar loco es precioso… el problema es la superioridad moral, que es mucho más traidora.
¡Un abrazo!
María José querida, vive y deja vivir.
Pues aquí tienes a otro jinete cuyo trompas se niega a que me ponga a escribir mientras estoy viajando, el jodío se desboca y no hay correa que lo domine!
Que le vamos a hacer, nuestra humanidad siempre está intentando hacernos la vida interesante.
Ánimo con ese libro, ¡el trompas y yo estamos deseando leerlo! 😉
Jajajaja, muchas gracias Juan. Espero no derrumbarme por la presión con tanta gente como ya lo ha comprado 🙂 Ya sé que tienes más artículos estupendos, pero es que el del Jinete y el Elefante, contado a tu manera, marcó un antes y un después. Es imposible escribir algo y que no te cueles, ¡jodío!
Un abrazo gigante.
No te puedes hacer una idea, ¡de la envidia sana que me das!
Mi más sincera enhorabuena por tu libro y que le espere mucho éxito.
¡Qué bien que estés de nuevo de vuelta!
Un saludo.
¡¡¡Muchísimas gracias, Laura!!! Espero poder ir reactivando el blog poquito a poco. Me dolió mucho dejarlo de lado porque, leches… ¡Es mi proyecto! Al final dedicamos tanto tiempo a los proyectos de otros en comparación con el que dedicamos a los nuestros…
Muchas gracias por estar ahí y un gran abrazo 🙂
¡¡Cómo te entiendo, Ana!! Me pasa exactamente lo mismo. Amo escribir, es mi refugio, forma de hacer catarsis y mucho más. Pero viajando en bicicleta me cuesta mucho poder sentarme a hacerlo. Primero, el encontrar un lugar donde conectar la computadora y después, siento mejor plan el bañarme, comer y tirarme a dormir. Así que, te banco 100% y aguardo con ansias a que mi mamá reciba el libro en su casa y me lo envíe a la parte del planeta en donde me encuentre dentro de 3 meses.
Exacto, Vir… ¡Es exactamente eso! Y cuando muchas veces lo tienes que hacer por trabajo, como es mi caso, los días “libres” que tienes, lo menos que te apetece es ponerte a escribir otra vez. Cada vez me costaba más y en el próximo viaje, tendré que pensar la manera de poder compaginar mejor todas las cosas para no volver a caer en los mismos errores.
Espero que el libro te guste muchísimo. Me está despertando muchas emociones el escribirlo y revivir todo el viaje y las cosas que ahora veo en perspectiva. ¡Ya me dirás desde dónde te toca recibirlo. Qué intriga 🙂
¡Un abrazo enorme!