¿Te acuerdas de cuando el mundo era un lugar salvaje y lleno de misterios? Surcado por valientes exploradores que arriesgaban su vida adentrándose en las selvas, montañas, bosques, cavernas, mares, desiertos y glaciares. No, ¿verdad? Yo tampoco. Pero eso no quiere decir que no podamos redescubrirlo a través de unas cuantas y oportunas frases motivadoras para viajar.
Nuestro mundo actual es un lugar conocido y sin enigmas, que sale muy favorecido cuando le sacan fotos desde la Luna, pero que según le vas haciendo zoom en Google Maps se ve un poco más gris. La mayoría de las veces lo vemos desde fuera. Hay un montón de lentes y pantallas condicionando nuestra visión del mundo y un montón de prejuicios entre nosotros y nuestras ideas sobre él.
Es normal que tengamos prejuicios: no podemos conocer todas las cosas, lugares y personas de primera mano. Lo que ya no es tan normal es que insistamos en creérnoslos y les demos el valor de auténtico conocimiento. En el caso de los lugares y los viajes, los prejuicios toman la forma de tópicos.
Y al final, nuestra sabiduría sobre el mundo suele reducirse a una pequeña colección de estos tópicos que hemos adquirido a través de la publicidad, las rencillas históricas, la sección internacional de los noticiarios y un alto porcentaje de opiniones desorientadas de personas que no han visitado los sitios de los que hablan.
Hoy he decidido dejar que hablen los sabios con estas diez (+1) frases motivadoras para viajar.
Para que no te desconcierte el formato de la lista, te explico que hay cinco ideas, cada una de ellas representada por dos citas, una de apertura y una de cierre, con una reflexión intermedia: eso hace el total de diez (me he sentido un poco azafata del “Un, Dos, Tres” al explicar esto).
¡Pero basta ya de divagar! Empecemos a viajar.
1. “Viajar es descubrir que todo el mundo se equivoca en sus ideas sobre otros países” (Aldous Huxley)
Estamos en una sociedad en la que tenemos ideas formadas sobre casi todo, pero cuando tratamos de profundizar un poco en ellas, nos damos cuenta de que muchas no se fundan en nada.
Vamos a probar: ¿Qué sabes de Noruega, por ejemplo, más allá de su capital y su situación en un mapa? Es un país donde los pescadores usan crema de manos muy hidratante (por el frío y tal) cuando van a recoger salmón ahumado en los fiordos. Muy nórdico y muy frío. ¿Más o menos coincidimos?
Si haces la prueba con cada país en el que no hayas estado, verás que tienes ideas vagas de este estilo sobre todos ellos. Sin embargo, también tendrás alguna opinión valorativa del tipo “es un país seguro”, “es un buen lugar para vivir” o similar. Ahora pregúntate, ¿cómo te has formado esa opinión si no tienes información apropiada del país en cuestión?
Pues porque ya te la han dado hecha, probablemente. Entonces, sería mejor tener en cuenta que:
2. “Los mundos nuevos deben ser vividos antes de ser explicados” (Alejo Carpentier)
Siguiendo el hilo de esta primera idea, vamos a por la siguiente:
3. “No vayas a creer lo que te cuentan del mundo (ni siquiera esto que estoy contando), ya te dije que el mundo es incontable” (Mario Benedetti)
No siempre es cierto que “cada uno tiene su propia opinión”; hay personas que tienen una, sí, pero no es suya. Me ha cautivado esta frase del gran Benedetti porque, como sabio que es, enseña también a dudar de lo que está enseñando.
Esta cita puede entenderse de varias maneras, pero la interpretación que más me gusta es la que sugiere que la fuerza de las vivencias no puede ponerse en palabras. Y ese mismo adjetivo, “incontable”, encierra también el sentido del mundo como un lugar inmenso, no numerable. Porque no se reduce al número de países, ni al diámetro del Ecuador, ni a la cantidad de sus habitantes…
O piénsalo de esta otra forma, ¿cuántas veces has pensado que esa fotografía no hace justicia para nada a lo que tú estabas viendo cuando la sacaste?
Las relaciones que establecemos con el mundo son también parte de él: ¿cómo pueden contarte lo que tú vivirías en Asia? ¡Es imposible! Por eso el mundo, tu mundo, es incontable. Por ejemplo, mi experiencia en Grecia fue maravillosa, pero no tiene por qué parecerse en nada a la experiencia que haya tenido otra persona. De hecho, yo estuve allí dos veces y cada una fue distinta.
Teniendo en cuenta esto, Ortega casi me suena indignado cuando dice que:
4. “Evitemos suplantar con nuestro mundo el de los demás” (Ortega y Gasset)
Por este camino aparecemos en un nuevo concepto:
5. “Uno cree que va a hacer un viaje, pero enseguida es el viaje el que lo hace a él” (Nicolás Bouvier)
Igual que nosotros hacemos el mundo, el mundo nos hace a nosotros. Y ocurre lo mismo con los viajes. Hay viajes de los que vuelves sin nada, salvo quizá una depresión postvacacional y unos cuantos souvenirs para la familia. Pero creo que los viajes de los que habla monsieur Bouvier son ese otro género de experiencias que nos abren los ojos a una realidad que desconocíamos.
Este es un sentimiento que comparto porque no sólo conozco a personas que están hechas de viajes, sino que algunos de mis viajes (sin haber sido aún tantos ni tan lejos) realmente me han hecho. Buceo entre mis publicaciones viajeras y me encuentro esta:
Hay andamios que han caído en estos días de intenso viaje, dejando ya firmemente construidas nuevas partes de mi estructura. Un trayecto acaba y otro inmediatamente lo continúa. Aunque parece que volvemos al mismo sitio, siempre y cuando nosotros hayamos cambiado, será imposible volver a lo mismo.
¡Bendita perspectiva! Esto es lo que ocurre cuando dejas de ver los lugares desde fuera y los ves desde dentro, hay un intercambio directo, una interacción en la que, al tiempo que entras, dejas entrar.
Es verdad. Por eso:
6. “Nuestro destino de viaje nunca es un lugar, sino una nueva forma de ver las cosas” (Henry Miller)
Vale, admito que estoy siendo parcial, así que voy a introducir otro punto de vista entre mis frases motivadoras para viajar favoritas:
7. “Si fuera cierto que el viajar enseña, los revisores de billetes serían los hombres más sabios del mundo” (Santiago Rusiñol)
Por supuesto, no todo el mundo tiene por qué compartir la idea de que viajar enseña. Sin la actitud y la predisposición adecuadas nunca aprenderemos nada de nada, en ningún lugar. Aunque el revisor esté viajando, no está comprometido con el viaje, sino con la tarea de revisar los billetes.
Si te vas a otro país y te limitas a hacer lo mismo que haces en el lugar donde vives, ir a sitios conocidos, interactuar solo con viajeros de tu misma procedencia… ¿Cuál es el objeto del viaje? El McDonald’s y las cadenas hoteleras internacionales son iguales en todas partes. Igual que el tren en el que viaja el revisor.
Pero si te involucras en el lugar al que llegas, mezclándote con la gente, alejándote de las zonas para turistas (donde se les ofrece aquello que ya conocen, con lo que se sienten más seguros) y vas en busca de la diferencia, acabarás por encontrarla. El mero hecho de descubrir esa diferencia desconocida e incorporarla a lo que sabías del mundo, ya es en sí mismo aprendizaje, sin entrar a valorar todas las demás cosas que puedes aprender (sólo si tú quieres).
En este sentido, es completamente cierto que:
8. “Nunca mejora su estado quien muda solamente de lugar y no de vida y de costumbres” (Quevedo)
Ya estamos terminando, así que vamos a ir hablando de finales:
9. “Los libros de viajes nunca salen solos. Cuando me preguntan por qué viajo y escribo, respondo que es una manera de escapar de la muerte” (Javier Reverte)
Esta confesión de inmortalidad y trascendencia me hace soñar despierta. Una vez más, el escritor juega con las palabras y los sentidos y la frase se carga de significados. Para escapar de la muerte, ¿basta sólo con viajar? ¿Basta sólo con escribir? ¿O hacen falta ambas cosas? La muerte a la que se refiere, ¿debemos entenderla en sentido literal? ¿O es que viajando se escapa a otras formas de morir?
Cuando escapas de la muerte una vez, como en mi caso, te asalta la necesidad inevitable de perseguir la vida. Y yo estoy totalmente volcada en hacerlo de la misma manera en que huye Reverte: viajando y escribiendo. ¿Y sabes qué? Voy a hacerlo (espera y verás).
Si los libros de viajes no salen solos, habrá que ir a sacarlos de donde estén.
Y así llego a la penúltima:
10. “Muere lentamente quien no viaja, ni lee, quien no sueña, quien no confía, quien no lo intenta…” (Martha Medeiros)*
*(Poema falsamente atribuido a Neruda: muchas gracias a Elena Barreto por comunicarme el error).
Me he dejado muchas, muchísimas reflexiones de grandes mentes viajeras en el tintero, pero no me cabe duda de que antes o después volveré a por ellas y te las llevaré hasta donde estés.
A menos de dos meses de emprender la que será hasta la fecha la mayor aventura de mi vida, me despido con un pasaje del escritor italiano Cesare Pavese:
Viajar es una brutalidad. Te obliga a confiar en extraños y a perder de vista todo lo que te resulta familiar y confortable de tus amigos y tu casa. Estás todo el tiempo en desequilibrio. Nada es tuyo excepto lo más esencial: el aire, las horas de descanso, los sueños, el mar, el cielo; todas aquellas cosas que tienden hacia lo eterno o hacia lo que imaginamos como tal.
¡Hola Anina!
Es un gusto conocerte por medio de un gran amigo que apesar del tiempo aún no tengo el placer de conocerle en persona pero tengo viva la esperanza de que algún día lo haré.
Leyendo tus frases o como bien dices, “las frases de otros” encontré la Diez que me encanta, incluso la tengo en alguna parte de mi blog de Facebook desde hace ya varios años y apenas me entero que es de Martha Medeiros gracias a ti. Es una forma de describir mi forma de ser y ver la vida. Y bueno todas las frases que has compartido en sí me gustan mucho.
Me parece perfecta la manera en que adaptas o transformas tu vida para afrontar una situación que no es fácil de afrontar. A mi me sucedió algo menos difícil talvez pero que me ha dejado grandes enseñanzas también, que de no ser por eso ya hubiera andado por el mundo no sé cuántas veces como ustedes.
Admiro mucho su dedicación al viaje y me atrevo a salir un poco del tema pues quisiera compartir contigo algo que me ha enseñado mi madre para bajar la acidez en la sangre. Ayudaría bastante a que te recuperes.
**Amarme a mí misma, perdonarme a mi misma y agradecerme a mi mism y a todos quienes formaron parte de mis más importantes recuerdos. ¿Cómo? Aceptando cada cosa, cada parte de mi tal como soy, cada defecto, cada acción y equivocación. Mis aspectos negativos y positivos, mis errores, mis prejuicios, mi pasado, aceptando a los demás y todo lo que pudiera yo utilizar para desvalorizar mi persona, mi amor propio y transformándolo en amor. Eso aunado a un cambio de alimentación con una dieta rica en frutos rojos, teés y jugos; arándanos, ciruelas, cerezas, fresas, frambuesas, manzanas, uvas, betabel, zarzamoras, teé de muitle, zarzaparrilla, muérdago, jugo de noni, papa cruda, ensaladas de berros, espinacas, lechuga etc.
Espero que sea de mucha utilidad pues seguramente te encuentras en plena satisfacción con lo que haces y eso es muy importante para cualquier persona**
¡Felicidades!
¡Hola, Karina!
Bienvenida al blog y muchas gracias por este comentario. Me alegra que el post te haya gustado tanto y, leyéndote, creo que es porque tenemos en común nuestra forma de ver la vida y el mundo. Una perspectiva que se resume en la frase de Martha Medeiros.
También quiero agradecerte especialmente tu preocupación y tus consejos. Afortunadamente, ya hace muchos años que me curé y desde entonces no he tenido ningún otro problema serio de salud. La verdad es que cuando enfermé, igual que ahora, era una persona muy feliz y estaba empezando una vida que me entusiasmaba. Creo que eso también me ayudó mucho a la hora de sobrellevarlo todo.
Además, desde hace más de 4 años llevo una dieta vegetariana (no tanto por motivos de salud como por motivos éticos) y todo ello contribuye también al bienestar de mi cuerpo. Y cuando empiece el viaje y le dé toda la actividad que ahora mismo le estoy negando, seguro que se pondrá aún mucho más contento 😀
Muchas gracias por pasarte y dejar por aquí una parte de ti.
¡Un abrazo muy grande!
¡Hola Antonio!
Pues me alegro de haber encontrado por fin el camino a tu tubérculo cardíaco, jajaja. Fíjate, si me hubieses dejado un comentario antes, habría visitado antes tu blog al que, por cierto, ya me he suscrito y habría pasado más tiempo por allí.
Muchíiismas gracias por el primer punto. Bueno, en realidad por todos, pero me siento especialmente contenta al sentir que soy capaz de hacer llegar todos esos significados y sensaciones desde mi cabeza hasta otra que me lee. Me sigue pareciendo una cosa fascinante 😀
Viendo los pedazo de invitados e invitadas que te gastas en esas #charlasviajeras es todo un honor que te plantees abrirme la puerta a formar parte de ello. Y por supuesto un placer. Cuenta con ese mail y no te preocupes si ves que tardo un poco: no soy famosa precisamente por mi velocidad, pero es que vivo en un mundo muy disperso, jajaja.
Me da el pánico escénico sólo de pensarlo pero oye… ¡los miedos están para vencerlos! Estoy muy muy segura de que la idea del viaje te va a encantar.
¡Hablamos prontito!
Muchas gracias por venir, por quedarte, por manifestarte, por invitarme, por halagarme y por animarme. ¡Vaya completo!
Un abrazooooooo.
No me lo he planteado, ha sido una proposición en toda regla!!!
Por cierto, acabo de ojear el proyecto de Pablo y es brutal. Dile que también tiene entrevista, y que ponga un contacto o algo en su blog que no hay manera de pillar su email por ahí!
¿Pánico escénico? ¿Has visto mi nariz en los vídeos que hago? ¿Has visto la de veces que le cambio el sexo a los sustantivos porque estoy nervioso? ¿Cuántas veces me quedo trabajo por segundo, 5? jajajaj
Ahí que salir sea como sea.
Espero tu email más pronto que tarde.
Un abrazo!
Jajajaja, no es para tanto hombre, lo que pasa es que uno diempre se ve a sí mismo muchísimo peor de lo que en realidad ven los demás. Autocrítica feroz. Al final el que está viendo la entrevista no se fija en esas cosas, está pensando mucho más allá…
Pablo está haciendo ahora una web nueva que va a ser maravillosísima, por eso tiene esa un poco descuidada. Pero bueno, como son tantas las posibilidades de contacto me ha dicho que ya habéis hablado. Te escribo para explicarte el proyecto y tú decides si quieres hacer la entrevista conjunta o por separado 🙂
¡Abrazouuu!
Perfecto!
Hola Anina, te leo y nunca comento.
Pero hoy es que llegaste a la patata de una forma brutal. Además, si tocas el tema de los viajes ya me tienes más que ganado.
Lo primero, que escribes que da gusto, ya quisiéramos unos cuantos transmitir la mitad de lo que tú lo haces con 3 o cuatro palabras.
Lo segundo. Las frases muy certeras. Me quedo con la de Bouvier porque siempre me pasa. Es la que más he experimentado en mi carnes.
Tercero. Me encantaría que me mandaras un mail y me contaras sobre ese viaje que vais a hacer. Si queréis contarlo en una de las #charlasviajeras de mi proyecto tenéis las puertas abiertas.
Un abrazo y mi más sincera enhorabuena
¡Hola Anina!
Yo me quedo con esta…
“Uno cree que a a hacer un viaje, y enseguida es el viaje el que lo hace a el”
No se sí enseguida, o como poso que va dejando el tiempo, pero indudablemente a menudo nos enfrentamos a desafíos, creemos solucionar problemas, conocer lugares nuevos, personas desconocidas, buscamos algo en concreto… Y es nuestra transformación al interacionar con ello la que nos sorprende por lo que nos inspira, nos enseña, nos hace reflexionar, nos condiciona, nos pone a prueba…
Empieza siendo un viaje físico y acaba siendo un viaje mental y una transformación.
Cuantos más kilómetros acumula nuestra mochila física, más posibilidades de experiencias para nuestra mochila emocional.
Uno de mis retos es romper la rutina de “estancamiento” en la que a veces me encuentro, pues soy comercial y me tiro el día conduciendo, hablando e interacionando. Digamos que mi ” dosis de sociabilidad” esta cubierta de lunes a viernes, y esto es un arma de doble filo.
Vivo prácticamente entre Cádiz y Málaga aunque tenga mi casa en Cádiz, y estoy deseando que llegue el fin de semana para pisarla y desconectar un poco del mundo… Lo cierto es que estas relaciones a veces son muy entretenidas y satisfactorias y otras muy rutinarias y aburridas donde ” hablo solo de mi libro”
Me siento en una etapa de TRANSICIÓN donde mi objetivo principal es cuidarme, redescubrirme, y organizar cuerpo y mente…
Gracias por acompañarme en el viaje!
;))
Un abrazo
Silvia
¡Hola Silvi!
Y qué cierta es. Dice uno de mis filósofos favoritos que cada persona se va haciendo al entrar en contacto con el mundo, en las interacciones que establece con él y en su forma de adaptarlo a sí misma. Y también estoy de acuerdo con que ese “hacerse” se puede dar en varios momentos: durante, después e incluso antes del viaje.
Encontrar algún momento de ruptura es esencial porque las rutinas nos llenan y nos llevan de tal forma que después viene esa gran sorpresa al pensar, “¡pero si es lunes otra vez!”. Y la semana se ha pasado volando.
Me ha hecho mucha gracia lo de “hablar de tu libro” 😀 Bueno, al fin y al cabo, es lo normal si eres comercial. Aunque seguro que eres una comercial muy poco convencional que tiene a toda la clientela encandilada.
No hay mejor objetivo que el que describes, ni más necesario. Espero que lo estés consiguiendo y que cada día consigas dar un pasito (mayor o menor) hacia él.
¡Gracias a ti, siempre!
¡Magníficas reflexiones Anina! Tienes una fuerza enorme para transmitir y hacer reflexionar a la gente. Se nota tu travesía por la filosofía :P.
Me ha encantado este artículo. Algunas de las citas me las he añadido a mi colección de frases viajeras. ¡Ya mismo podré escribir un libro nada más que de citas! jajaja
Un fortísimo abrazo Anina 😉
¡Hola Oliii!
Muchísimas gracias por el pedazo de halago, bueno, por todos en general, hacia el artículo y hacia mi persona 😀 Ya me has dado el subidón del día, jajaja.
Encantada estoy de que te encante. En principio la idea era hacer una lista más convencional, pero al ir seleccionando las frases me di cuenta de que juntas iban contando otra historia, otra visión de las cosas y que tenían mucho más valor como hilo argumental que como elementos aislados.
Aprovecho para disculparme por no haberte dado aún feedback en tu súper proyecto (http://olivertrip.com) y te felicito por esas arrasadoras 2.470 visitas en uno de tus primeros posts. ¡Eso es entrar por la puerta grande! Te sigo muuuy cerca así que, ¡no te despistes! Jijiji
¡Un abrazote tamaño tú!
Hola, Anina
Como dices al inicio del Blog, si estas aquí es por algo.
Aquí estoy muy feliz emocionada de leer todo lo que escribes, es maravilloso ver como haz generado tantas respuestas a mi vida, con tus publicaciones, haz sido como una lucecita que me ilumina el camino. Quiero felicitarte por tu excelente dedicación, Por usar tu pasión como trabajo y al mismo tiempo disfrutar tu vida con lo que mas te gusta.
Lo mas bello generar en mi la pasión por leerte, tienes talento, gracias por darte la oportunidad de compartirlo. No sabia en cual entrada escribirte, aquí fue, tocaron mi tierra Venezuela. Mañana realizo un viaje de paseo con mi familia y con tus frases y motivación me voy inspirada apreciar cada instante.
De mi parte tienes aquí una fiel seguidora porque impregnaste mi ser y cada dia lo seguiras llenando con cada entrada o publicación que coloques en la diversas Redes Sociales.
Att. Carmen Haydee.
Gracias miles.
¡Hola, Carmen!
Miles de gracias a ti por dejarme este comentario tan bonito, pura motivación y ánimo para mí: más ganas para seguir escribiendo todas las semanas con la convicción de que realmente puedo ayudar a otras personas. Ese era uno de los principales objetivos del blog y me proporciona una gran satisfacción personal saber que lo estoy consiguiendo.
Igual que mis palabras han podido ser para ti una pequeña luz en el camino, las tuyas también lo han sido para mí.
Muchísimas gracias, de verdad. Esta es la mejor parte de tener un blog y seguiré trabajando con la misma ilusión y la misma energía para seguir aportando a través de mis experiencias tanto valor como me sea posible.
¡Un abrazo enorme y disfruta mucho del camino!
Es un placer saber que me acompañas en el mío.
¡Hola, Joseee!
Me encanta la de Benedetti: no la conocía y ese doble sentido entre el narrar y el cuantificar a través del contar me cautivó completamente. Yo intento ir acercándome más a esa habilidad para contar lo incontable, pero el hecho de saber que es imposible sólo la hace más atractiva 😀
¿Un par de meses? Ohhh, ¿hay un nuevo horizonte en ciernes? ¡Cuentaaa! ^^
Hola, Anina!
Me quedo la tres, la de Benedetti. Sí, el mundo es incontable, imposible narrar todo lo que pasa por las retinas y los oídos del que viaja, o como el cuerpo experimenta en si mismo todo ese cúmulo de sensaciones nuevas, de olores, de sufrimientos y satisfacciones. Y después de todo y por mucho que uno viaje, al final hablando en términos absolutos, sólo habrá llegado a conocer y de manera subjetiva una insignificancia
A mi me quedan un par de meses más. 😉
muy buen post, la frase que me ha gustado más es la de Martha Medeiros, más que una frase de viajar es una frase de vida.
para mi un viaje es una aventura que no sabes como empieza ni como acaba, es lo que más sensación de libertad me transmite.
Admiro muchísimo tu blog, estas haciendo un muy buen trabajo. Sigue así!
a volar y si no se puede a imaginar que es otro viaje! 😉 ( ya lo dicen que la mayoría de recuerdos vienen de la imaginación)
¡Hola Mark!
Muchísimas, incontables gracias por transmitirme una satisfacción tamaño elefante africano con tu comentario. Cada vez que le doy al botoncito de “publicar” me asaltan ciertos miedos, pero un sólo mensaje de algún lector/a los compensa todos instantáneamente. Y si son como este, ¡ya ni te cuento!
Si os quedáis cerca, prometo hacer volar vuestra imaginación tanto como pueda 😀
¡Un abrazo!
Muy bueno!!! Creo que me quedo con la 3, pero… Es como elegir un lugar.. Me las guardo todas!!!
¡Hola, Clara!
Pero cómo me gusta la comparación que has hecho 😀 Como con los lugares, es imposible elegir solamente una. ¡Genial!
Muchas gracias por pasarte, comentar y dejar la perlita tras de ti.
¡Un abrazo!
Muy buenas frases, y claro que estamos llenos de prejuicios, algo que hace que muchos lugares fascinantes los visite muy poca gente, porque tienen fama de no tener nada o ser cutres. Ejemplo fácil: Portugal.
Discrepo con lo de las fotos. A mi hay unos cuantos sitios que me parecen más bonitos verlos en mis fotos que en persona, como por ejemplo Escocia 😛
¡Hola Machbel! (Te voy a llamar por tu nombre de guerra).
Jajajaja, me has dado que pensar que igual lo de las fotos sólo nos pasa a los que no sabemos de fotografía. Cierto es que cuando las condiciones climatológicas son patagónicas la percepción presencial de la belleza se resiente por un ánimo achicado. O que también pueden obrarse milagros como hacer que un sitio de por sí feo, aparezca como algo bello por obra y gracia del fotógrafo/a.
Pero a mí siempre suele pasarme lo contrario 😀
Coincido en el ejemplo de Portugal. Estuve allí el año pasado y me encantó.
¡Un abrazote y gracias por pasarte y comentar y compartir y por todo!
Mis preferidas han sido las de Huxley, Miller y Neruda. Los estereotipos son ese conocimiento provisional que tenemos para rellenar un hueco, lo malo es que muchos se resisten a modificarlos luego. Un ejemplo lo tenemos en Venezuela o Cuba, si preguntas a la gente de la calle, todos dirán que son lo peor aunque luego no sabrán definir exactamente qué problemas existen allí. Pero eso es tan antiguo como el caminar, de hecho el arqueólogo Manuel Bendala sostiene que los estereotipos ya los utilizaban los griegos, a través de los mitos, para acercarse a territorios desconocidos y entre otros nos pone el mito de Medusa, que sería una representación de unas divinidades oculares encontradas en la Península. La derrota de Medusa por Perseo se da toda vez que los griegos ya han explorado la Península Ibérica. Ves, siempre terminamos hablando de los griegos.
Un saludo.
¡Hola Aitor!
Pues fíjate, me avisó una lectora por privado de que el poema que comienza con la frase nº10, que suele atribuirse a Neruda, en realidad es de Martha Medeiros. Me he alegrado mucho de estar equivocada porque así ha aparecido una mujer en lista (¡no me había dado cuenta de que no había ninguna!)
Lo malo también es que a veces esos prejuicios (como suele ocurrir con la mayoría de los que tenemos) nos condenan a no formarnos nunca un juicio propio y verdadero. Si creemos que un lugar es lo peor, no vamos a ir hasta él para comprobar lo que realmente es y siempre pensaremos lo mismo.
Los griegos en su mayoría eran muy tiquismiquis pa estas cosas de los extranjeros, sí. De hecho, igual ya sabes que el término “bárbaro” lo inventaron ellos para definir a las personas extranjeras, que no hablaban griego.
Pero sí, ya ves que de hecho los pongo de ejemplo en el propio post: da igual si son antiguos o modernos, siempre tienen algo que mostrar 😀
¡Un abrazoo!
Anina :)cMe quedo con la 10 aunque todas son buenas. Que ganas de viajar.
¡Hola Deivid!
La verdad es que respecto a algunas, como la 10, no tenía ninguna duda de que quería que formasen parte de la lista. Muchas gracias por pasarte a leer y dejar un comentario ^^
Ya sabes, ¡a hacer la maleta! Pero mete poquitas cosas, que ya decía Antoine de Saint-Exupéry que “aquel que quiere viajar feliz, debe viajar ligero”. 😉
Un abrazooooo.
Todas son buenas pero me quedo con la 5
¡Hola María!
Excelente elección. Es una frase que me gustó especialmente por el desplazamiento de sentidos que hace. Creo que en el fondo de ella subyace un ataque directo al egocentrismo, una declaración de humildad que me encanta.
Muchísimas gracias por leer y por participar.
¡Un abrazo!